El ser humano a través de la historia siempre ha procurado protegerse y proteger a sus allegados ante cualquier contingencia que se le pudiese presentar a lo largo de su existencia, hubo unos primeros intentos en épocas tempranas de cumplir estos cometidos, pero por la fragilidad con la que fueron instaurados no permitió que estos esfuerzos de aseguramientos de la existencia trascendieran, quedando los individuos a merced de cualquier situación adversa relacionada con su estado de bienestar y protección ante situaciones no deseadas.