El tratamiento no quirúrgico ha experimentado un importante desarrollo en el tratamiento de los traumatismos abdominales, ya que permite mejorar las tasas de supervivencia y de rescate de órganos. También evita a los pacientes las complicaciones de una laparotomía innecesaria. Actualmente, sus indicaciones están aumentando gracias a la contribución de la embolización arterial. Esta técnica se desarrolló inicialmente para pacientes con traumatismos retroperitoneales graves, principalmente de riñón y pelvis, y ahora es factible en pacientes con traumatismos hepáticos y, más recientemente, esplénicos. El enfoque no quirúrgico dista mucho de serlo: en cualquier momento, el lesionado puede presentar signos que evocan una hemorragia mayor, daños en los órganos huecos o en el páncreas, o un síndrome compartimental abdominal. El cirujano deberá reconocerlas y saber tratarlas a tiempo, lo que implica un verdadero esfuerzo de formación quirúrgica en traumatología.
Hinweis: Dieser Artikel kann nur an eine deutsche Lieferadresse ausgeliefert werden.
Hinweis: Dieser Artikel kann nur an eine deutsche Lieferadresse ausgeliefert werden.