Dado que el transporte puede producir importantes beneficios, pero dando lugar a muchas externalidades negativas, es necesario diseñar políticas adecuadas para maximizar sus beneficios y minimizar sus inconvenientes. La asignación, el diseño y la construcción de infraestructuras y servicios de transporte deben ser objeto de una cuidadosa planificación, tanto por parte de los organismos públicos como de los privados. Hay que distinguir entre política y planificación, ya que la primera suele referirse a las estrategias y objetivos, mientras que la segunda se refiere a las acciones concretas. Dado que ambas deben reflejar los cambios fundamentales de la sociedad y las cuestiones y problemas contemporáneos, las políticas y la planificación cambian constantemente. Por ejemplo, la orientación cambiante de las políticas públicas condujo a la desregulación de muchos sectores del transporte. Entre las cuestiones políticas fundamentales, la seguridad del transporte ha pasado a primer plano. Las catástrofes naturales y antropogénicas son también un serio reto para la planificación del transporte.
Hinweis: Dieser Artikel kann nur an eine deutsche Lieferadresse ausgeliefert werden.
Hinweis: Dieser Artikel kann nur an eine deutsche Lieferadresse ausgeliefert werden.