La modernidad basada en la razón postuló sociedades utópicas donde reinaría la justicia, la igualdad, la fraternidad y la paz en contraposición a hechos como la guerra de los 30 años en Europa y a la explotación y discriminación que producía el régimen feudal y las monarquías absolutas. La modernidad tuvo un desarrollo importante a través de la industrialización, la construcción de los estados-nación y el régimen político republicano, utilizó la ciencia y tecnología como la palanca fundamental del desarrollo y el progreso social. Sin embargo, también ha mostrado contradicciones, crisis y hechos que escapan a lo racional y expresan que la irracionalidad en muchos momentos desborda la racionalidad.Frente a estas contradicciones y crisis insurge diversas corrientes y movimientos críticos en la poseía, la pintura, la literatura y la arquitectura y últimamente en la filosofía, que apareció como posmodernismo (corriente literaria) y ahora se está constituyendo en una corriente filosófica con pretensiones de tener un alcance civilizatorio al que se denomina posmodernidad.