Es importante considerar que el turismo es una estrategia para dinamizar la economía de las poblaciones que habitan áreas protegidas. Sin embargo, es fundamental orientar estas actividades para que no generen impactos en los ecosistemas. Como primer objetivo se realizó un diagnóstico del territorio, en el cual se identificaron los atractivos naturales, los prestadores de servicios complementarios de turismo y se validó el potencial de avifauna del área protegida. El segundo objetivo consistió en determinar las características del perfil del visitante de aviturismo y el cálculo de la capacidad de carga de los atractivos identificados. Por último, se formuló una estrategia para el desarrollo del aviturismo mediante la identificación de debilidades, oportunidades, fortalezas y amenazas.