La producción ovina en México se localiza en el centro del país con sistemas de explotación que se caracterizan por un bajo nivel tecnológico, propiciando baja productividad y por ende, una oferta insuficiente en relación con la demanda interna. Actualmente, se importa en promedio un 50% del consumo total. Una alternativa que puede incrementar la producción es la explotación intensiva con mayor uso de tecnología y mejor manejo de los recursos. La investigación persigue aprovechar eficientemente los recursos existentes e inducir a los productores a la creación de alternativas de ingreso, determinando la viabilidad técnica y financiera del proyecto de producción de ovinos. Los resultados muestran que existe un amplio mercado de este producto y que hay que aprovechar los esquemas de financiamiento público y privado. El horizonte de planeación del proyecto es de 5 años, en este periodo se obtuvo una TIR del 23.93%, indicador claro de que la actividad ovina es rentable, una relación B/C de $1.28 y un VAN de $ 354,297.98. De continuar las tendencias de aumento en el consumo y en el precio, la puesta en marcha de este proyecto es una clara posibilidad de obtener beneficios económicos.