En el Ecuador el 37% de los habitantes pertenecen al área rural, la cual se establece como una parte de la población marginal, porque mantiene la falta de acceso a la red eléctrica estable por la tardía acción del estado. Su mayor fuente de ingresos es la agricultura. El programa de las cocinas de inducción en el Ecuador fue determinado como un pionero en la región, ya que, el gobierno en pleno proceso de inversión, llevo a cabo la infraestructura para obtener excedentes de energía eléctrica que cumpliría con abastecer al territorio Nacional. El programa de las cocinas de inducción obtuvo un gran mérito en ser impulsado, pero, las expectativas fueron disminuyendo por el riesgo de aumentar el gasto a la población rural, sin embargo, algunos si lo hicieron, aun, teniendo menos acceso a la red eléctrica estable. Las cocinas de inducción son un precedente que se mantiene en el olvido por falta de recurso de impulsarlo para que este sea atractivo para todo el Ecuador. En términos económicos para la población el subsidio no ha sido equitativo al que mantiene actualmente el gas licuado.