En este libro se analiza la mentalidad cainita, la persecución demonológica, la educación social de los españoles en relación con otros países europeos, a través del método antropológico para el análisis histórico, desde el estudio de la obra de uno de los autores casi marginales, en la línea que establecieren Cervantes, Quevedo o Larra. Un pensamiento independiente, que ataca a la izquierda y a la derecha, según se conciben aún hoy. No es un estudio solo de la literatura como fuente histórica, sino desde los comportamientos políticos y la aplicación del diagnóstico Barojiano. Hay que recurrir a la antropología cultural y a la filosofía, de ahí los consejos y alusiones a mi maestro Julio Caro Baroja, el ilustre sobrino de D. Pío.