El incremento en la resistencia a los antimicrobianos, así como sus efectos colaterales adversos e interacciones farmacológicas, ha determinado la necesidad de buscar constantemente nuevos fármacos que sean efectivos y de baja toxicidad. En las últimas décadas, diversas plantas han sido motivo de investigación en la extracción y caracterización de principios activos terapéuticos. Los productos naturales en forma de extractos vegetales constituyen un rico acervo cultural y son una alternativa de solución a los problemas de salud pública y por tanto en la actualidad son objeto de investigación científica, para garantizar la calidad tecnológica, la eficacia terapéutica e inocuidad de los mismos, como parte de su caracterización se realizan pruebas para la determinación de la actividad biológica antibacteriana y antifúngica.