La infección del tracto del clavo es un problema frecuente en la cirugía ortopédica y traumatológica, con una alta incidencia de entre el 10% y el 100% descrita en la bibliografía. La infección se produce cuando las bacterias se adhieren a los clavos del fijador externo y posteriormente producen una biopelícula que protege a las bacterias de las defensas del huésped. Staphylococcus aureus y Staphylococcus epidermidis son las cepas más comúnmente implicadas cuando se produce una infección. En los últimos años, algunos autores han utilizado diversos materiales de recubrimiento, como quitosano, hidroxiapatita, antibióticos, clorhexidina y yodo, y óxido nítrico, para reducir la infección en el lugar de inserción de la aguja, y se han propuesto diversos protocolos de tratamiento, como el uso de antibióticos profilácticos y los cuidados postoperatorios de la aguja, que incluyen cambios de limpieza, cambios de apósito y duchas. En este trabajo, desarrollamos un recubrimiento de zinc de carboximetil quitosano con el objetivo de reducir la biopelícula bacteriana que rodea la zona de inserción.
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