La cuestión saharaui se ha convertido en una de las controversias más longevas del mundo. Esta región es una antigua colonia española en el noroeste de África. Desde la retirada de España en 1975 este territorio ha vivido un conflicto entre Marruecos que reclama derechos históricos y el Frente Polisario (considerado por las Naciones Unidas el representante legítimo de la población saharaui) que solicita la organización de un referéndum de libre determinación. Casi 50 años después, el conflicto se encuentra estancado y con pocas perspectivas de solución a corto plazo. La controversia está condenando la estabilidad y el desarrollo de la región del Norte de África. Es la población saharaui, quien vive dividida por uno de los muros más largos del mundo y quien está perdiendo la esperanza en cualquier solución pacífica, la que sale peor parado de esta contienda. La ONU lleva décadas intentando organizar un referéndum, sin embargo los intereses de las grandes potencias se han cruzado en su camino. España sigue siendo la potencia administradora del territorio según el Derecho Internacional. La UE sigue de cerca los acontecimientos de este largo conflicto