La Vida me regaló intensas vivencias, "haciendo" Salud Pública interactuando con familias campesinas, en diversos escenarios del norte argentino. En ese dialogar, observar, estar, preguntar y preguntarme, actividades de mi práctica profesional, percibo tres caminos que las familias campesinas emprenden, en forma no excluyente, para el cuidado de la salud: dirigirse al "hospital" donde están las "doctoras" o los "doctores"; acudir a personas muy queridas en la comunidad por su función de "sanadoras", y realizar prácticas en el seno del propio hogar, por parte de algunos de los miembros de la familia o de familias vecinas, que se ofrecen compartiendo solidariamente sus saberes y sus haceres. Me llamó poderosamente la atención que este "hacer cosas entre nosotros" genera un ser y estar en alegría, además del alivio y/o de la curación, lo cual me llevó a configurar los ejes que orientaron las actividades de este trabajo: - ¿Cuál es la génesis de los saberes implícitos en las prácticas que adquieren el carácter de autogestivas? - ¿Qué existe en la esencia de esos saberes que genera ser y estar en alegría, además del alivio y/o de la curación?