En las discusiones contemporáneas, hablar de necesidades culturales causa ruido. Aunque en Santa Catarina del Monte (Texcoco, Estado de México) no hay instituciones culturales formales, hay un gran desarrollo: la música, la floristería y un amplio conjunto de tradiciones que fortalecen la vida comunitaria y el desarrollo humano. El patrimonio le da sentido a la comunidad cuando es transmitido y valorado, cuando crea identidad, cultura, tradiciones, creencias y memorias a través de los individuos, pero algunas prácticas de la cultura viva, no conforman un patrimonio reconocido y consolidado, a pesar de los recursos que tienen para expresarse. Para retratar a la comunidad hay que usar una lente híbrida, considerando que la cultura tradicional está en constante cambio, en gran parte, por las relaciones sociales, transformando tradiciones, saberes y prácticas, tanto ancestrales como modernas.