Ser campesino es un proyecto de realización humana. Pero los campesinos ante el modelo hegemónico, tienen un sistema de posibilidades que impide asumir el proceso. Aquellos que buscan alternativas agroecológicas y un comercio solidario, se oponen a la agricultura industrializada como el modo que debieran asumir desde la razón moderna y la lógica del sistema neoliberal. Esto representa un proceso de descampesinización que termina por convertirlos en agroempresarios, jornaleros, emigrantes o agronarcos. Hay experiencias que han sido invisibilizadas, pero que ahí están como alternativas contrahegemónicas de recampesinización, que entregan un sentido de esperanza en seguir siendo campesinos y con ello entregar modos distintos de estar en la realidad, de relaciones en equilibrio con la naturaleza y de justicia social. Por ello, es necesario comprender y detonar los factores que pueden impulsar estas alternativas. Es un proceso que incumbe no sólo a los campesinos, sino a toda persona en el planeta para seguir entregando esas semillas de esperanza para el ser humano.