Costa Rica se ha caracterizado históricamente por priorizar la protección de niñas, niños y adolescentes, actualmente un gran desafío social y estatal es lograr la efectiva garantía de sus derechos humanos. Este desafío conlleva a un cambio metodológico estatal de la intervención institucional fragmentada, sin participación ni protagonismo por parte de las personas menores de edad, hacia una protección integral de derechos con ejercicio activo de ciudadanía acorde a la autonomía progresiva. La explotación sexual comercial es un flagelo presente en la sociedad y una severa violación a los derechos humanos, que produce graves daños al desarrollo integral. El presente trabajo propone estrategias de gerencia social local para el logro de sinergia interinstitucional en la conformación y sostenibilidad de redes locales que trabajen para la garantía, protección, defensa, atención integral y restitución del ejercicio de derechos a niñas, niños, adolescentes y sus familias insertas en condiciones de vulnerabilidad o atrapamiento en explotación sexual comercial.