A lo largo de los años, se han empleado muchas técnicas para el diseño y la construcción de un sistema de comunicación de audio eficaz. Inicialmente se empezó con la técnica de cable con sus limitaciones asociadas, como la de tener una distancia fija, limitando así el movimiento del usuario de tal sistema a la técnica inalámbrica que resultó ser más conveniente y flexible, por lo que tiene un mayor alcance de cobertura que la técnica de cable. Radiofrecuencia (RF) una técnica inalámbrica convencional que se emplea normalmente en el diseño y la construcción de un sistema de comunicación de audio tiene algunas limitaciones que incluyen: diseño costoso de los circuitos, son propensos a sufrir efectos de interferencia especialmente cuando hay otros sistemas que están transmitiendo a casi la misma frecuencia de audio, tienen un nivel de seguridad bajo/mínimo, tienen velocidades de datos bajas/mínimas, pueden requerir el pago de derechos de licencia a las agencias reguladoras federales, etc. Basándose en estas limitaciones, se necesitaba una técnica alternativa al diseño de un sistema de comunicación de audio.