La potenciación de discursos y prácticas políticas alternativas que reconozcan y vinculen las iniciativas y procesos que se vienen produciendo y desarrollando en el campo de la educación como escenario no sólo legítimo sino también estratégico para la conflictiva y nunca acabada construcción de los proyectos de sociedad deseados, pasa por reconocer que otros escenarios, procesos y sujetos de la política son posibles. Más allá de los sujetos políticos tradicionales: el Estado, los partidos políticos, los grupos de presión, pensar a las y los maestros vinculados a experiencias de Movilización Social por la Educación como sujetos políticos alternativos exige tener en cuenta las problemáticas y las tensiones que históricamente han sido constitutivas de este tipo de procesos organizativos dirigidos a generar movilización de pensamiento y acción social instituyente.