Los valores son percibidos emocionalmente en virtud de un acto de amor. Íntimamente relacionado con el concepto de valor está el de persona como valor de los valores . Ésta es inobjetivable; no se le entiende sino que se le comprende ; no se la conoce en virtud de un acto intelectual sino que se le ama. Y, en virtud del amor, se intuye moralmente su esencia: su "ordo amoris". Sin perjuicio de la innovación que la teoría de los valores de Scheler supuso, esta se asentó sobre ciertas doctrinas agustinianas, y, en particular, sobre el concepto de amor cristiano tomado de San Agustín. A lo largo de esta obra se repasan los elementos de la ética scheleriana y la influencia que ejerció sobre ella el Obispo de Hipona. Así, puede calificarse el periodo central del filósofo alemán como periodo agustiniano , y abrirse una nueva línea de investigación que corrija los problemas a que dio lugar la pretendida fundamentación axiológica de la ética. Esta nueva empresa podemos emprenderla con base en el concepto de amor, y con el fin de construir una ética del amor que, sin renegar del concepto de valor , no pierda de vista el verdadero objeto material de la ética: el bien.