En este trabajo se aborda el tema de la vivienda desde una perspectiva crítica respecto a la cada vez más frecuente falta de consideración hacia sus usuarios, hacia su realidad y circunstancias. Es un texto que se mueve en el terreno de la deontología de la arquitectura, del compromiso de colaborar con una producción adecuada de espacios habitables, concretamente viviendas, considerando la dignidad de la persona y el hecho de que existen habitáculos que dignifican, pero que también los hay que denigran, a sus ocupantes. Por otro lado, el derecho a una vida digna viene con el hecho de la existencia de la persona misma, y su acceso a una vivienda es parte fundamental de los derechos humanos universales. Como parte de los requerimientos básicos para la vida digna de todo ser humano, la vivienda es un componente intrínseco a su existencia. Se hace necesario puntualizar que no se trata de un bien opcional, ya que todos los seres humanos del planeta, y de todas las épocas, hemos requerido de él por el mero hecho de existir. El libro va dirigido a los arquitectos y a los estudiantes de arquitectura, pero principalmente a los usuarios de la arquitectura, es decir, a todo ser humano.