9,99 €
inkl. MwSt.
Versandkostenfrei*
Versandfertig in 1-2 Wochen
payback
0 °P sammeln
  • Broschiertes Buch

Érase una tarde del mes de noviembre; recios copos de nieve caían en las extensas llanuras de la Mancha, vistiendo de blanco ropaje los humildes tejados de un pueblecito, cuyo nombre no hace al caso, y cuyos habitantes, que apenas pasaban de trescientos, tenían fama por aquella comarca de sencillos y bonachones. -Apresuremos el paso, que el tiempo arrecia y aún falta una legua ¿decía un jinete caballero en un alto mulo a un labriego que le acompañaba sobre un pollino medio muerto de años; arreó el labriego su cabalgadura, y con un mohín de mal humor, sin duda porque la nieve le azotaba el…mehr

Produktbeschreibung
Érase una tarde del mes de noviembre; recios copos de nieve caían en las extensas llanuras de la Mancha, vistiendo de blanco ropaje los humildes tejados de un pueblecito, cuyo nombre no hace al caso, y cuyos habitantes, que apenas pasaban de trescientos, tenían fama por aquella comarca de sencillos y bonachones. -Apresuremos el paso, que el tiempo arrecia y aún falta una legua ¿decía un jinete caballero en un alto mulo a un labriego que le acompañaba sobre un pollino medio muerto de años; arreó el labriego su cabalgadura, y con un mohín de mal humor, sin duda porque la nieve le azotaba el rostro, se arrebujó en su burda manta, encasquetándose el sombrero hasta la cerviz, y diciendo de esta manera: -Vaya, vaya con don Gaspar, y qué rollizo y sano que se nos viene al pueblo; ya verá su merced qué contento se pone don Melchor cuando le vea llegar tan de madrugada; según nos dijo ayer, no se esperaba a su merced hasta esotro día por la tarde; nada, lo que yo digo, esta Nochebuena estamos de parabién; todas las personas de viso se nos van a juntar en la misa del gallo; digo, si no me equivoco, porque parece que también el señor don Baltasar está para llegar de un momento a otrö
Hinweis: Dieser Artikel kann nur an eine deutsche Lieferadresse ausgeliefert werden.