La yuca (Manihot esculenta Crantz) es un alimento básico para personas de escasos recursos económicos, sin embargo, posee compuestos cianogénicos como linamarina y lotaustralina. A la fecha se han estudiado los efectos de linamarina a nivel de Sistema Nervioso Central, pero no se han estudiado las alteraciones conductuales, renales y hepáticas que pudiera provocar. Los parámetros que evalúan la función renal se encuentran elevados en ratas tratadas con linamarina 20mM, respecto al vehículo. En este mismo grupo se encontraron incrementados los valores de las pruebas de funcionamiento hepático, al contrario las proteínas totales y la albúmina se encontraron disminuidas. La administración intraperitoneal de linamarina promovió alteraciones motoras caracterizadas la conducta de giro en la prueba de nado. Así, la administración intraperitoneal subcrónica de linamarina en un tratamiento de 24, 5 y 1 hora antes de realizar las pruebas conductuales y la toma de la muestra, provoca incoordinación motora en nado, así como daño renal y hepático en la rata macho Wistar, lo que señala que este principio activo, contenido en la yuca, podría contribuir a los efectos tóxicos asociados a su consumo