Se presentan los resultados de un estudio comparado a nivel subnacional en México durante el periodo 1990-2002, en el que se analiza la incidencia de los sistemas de partidos y de las relaciones entre el ejecutivo y el legislativo, en la independencia formal, la composición y las atribuciones legales de los órganos de administración electoral. Se sostiene que el proceso de transición a la democracia debe ser visto tanto a la luz de los comportamientos políticos e institucionales heredados de la larga hegemonía del Partido Revolucionario Institucional, como por el comportamiento estratégico de los actores políticos relevantes. Igualmente, se presentan una gran cantidad de datos que indican que los cambios en los sistemas de partidos, así como las transformaciones en la relación entre el ejecutivo y las legislaturas, influyeron directamente en el diseño y rediseño de la estructura y el funcionamiento de los organismos electorales. Este texto puede ser útil para los políticos, legisladores y académicos interesados en mejorar el diseño de las instituciones electorales, particularmente en lo concerniente a los órganos de administración electoral.