La relación entre medio ambiente y salud se ha convertido en una realidad tangible, ya que las alarmas por problemas sanitarios y, en particular, las difundidas por los medios de comunicación, han ido concienciando cada vez más a los ciudadanos y han originado también temores crecientes sobre los efectos negativos para la salud de un medio ambiente contaminado, de tal modo, que en todos los países, estas cuestiones han ido adquiriendo cada vez mayor importancia, también en el ámbito político. Relacionar el medio ambiente con la salud es un requisito esencial para lograr un desarrollo sostenible. Sin embargo, un problema efectivo sobre este asunto es que mucha gente piensa que esta relación solamente es competencia del sector salud cuando la realidad nos dice que se trata de un asunto multidisciplinar que incumbe a todo el mundo. Ni el sector salud ni el de medio ambiente podrán enfrentarse separadamente para afrontar los problemas que afectan a ambos.