En Venezuela, a pesar de reconocerse la importancia de brindar educación adecuada a niños con Altas Capacidades Intelectuales, no hay una política de estado para su detección y atención educativa; solamente se cuenta con una Fundación no gubernamental llamada Motores por la Paz, quien para el año 2014 habían identificado ciento veinte niños y adolescentes con un Coeficiente Intelectual mayor a ciento treinta y refieren que estadísticamente deben existir aproximadamente ciento sesenta mil niños con Altas Capacidades Intelectuales. En este sentido, los programas de educación universitarios (específicamente en formación docente), deben asumir la tarea de rescatar ese porcentaje de niños, partiendo de que todas las personas necesitan una educación que les permita desarrollar sus potencialidades. En esta investigación, se desplegó un estudio sociocrítico bajo el paradigma cualitativo, bajo el método Investigación Acción Participante, a través cuatro fases; para ello, se consideraron tres actores sociales como informantes; las técnicas para la recolección de información fueron la observación directa y la entrevista a profundidad, mientras que los instrumentos fueron las notas de campo.