Hoy en día es común oír la expresión "las Psicologías" en lugar de "la Psicología". ¿Por qué se hace una distinción de este tipo? ¿Por qué no es algo que se escuche en alguna otra ciencia? Se oye hablar de "la" Física, "la" Química, "la" Historia, etc., pero al momento de hablar de Psicología pareciera haber una dificultad en definir qué es exactamente lo que estudia o hace dado que hay tantas opiniones y argumentos al respecto como corrientes teóricas en esta disciplina. La variedad de concepciones acerca de qué es (o qué debería ser) la Psicología ha generado que los conceptos, métodos de estudio y aplicaciones sean no sólo múltiples sino hasta contradictorios (Bunge y Ardila, 2002; Peláez, 2009), y no obstante aun las nociones más contrarias llegan a tener similitudes entre sí (Mares y Carrascoza, 2016). ¿Es posible entonces, una reconciliación entre las distintas corrientes psicológicas? Esta pregunta es difícil de responder. Por ello, el objetivo del presente libro es analizar las distintas posturas sobre las posibilidades de unidad o diversidad en Psicología, para posteriormente evaluar diferentes propuestas al respecto.