La Universidad de Los Andes, universidad de la provincia venezolana con mas de 227 años de experiencia inicia en la década de los 80 el proyecto "fábrica de fábricas" que plantea escalar proyectos académicos para convertirlos en productos. Como un mecanismo para agilizar el mismo, crea en 1991 el Centro de Innovación Tecnológica (CITEC-ULA) y en 1992 la Corporación Parque Tecnológico de Mérida por exigencia del CONICIT (organismo oficial que regía el sector de ciencia y tecnología), generando una rica experiencia de como vincular la universidad al sector productivo, experiencia que hemos querido plasmar en este trabajo como un testimonio que permita a otras instituciones y a las futuras generaciones evaluarla con sus aciertos y desaciertos en aras de lograr la consolidación de este tipo de experiencia, por lo que significan para el desarrollo educativo y económico del país.