La creciente complejidad política y socio económica que enfrenta la República Bolivariana de Venezuela ha llevado al deterioro de los servicios y las condiciones de vida de la población que vive en el país. Como consecuencia, se ha desarrollado una emigración masiva, que en pocos años ha registrado la cifra récord de 5,1 millones (julio 2020) de ciudadanos venezolanos que según ACNUR y OIM, se encuentran fuera del país.El empeoramiento del fenómeno y la velocidad exponencial con la que han crecido los números de la diáspora, ha generado una emergencia humanitaria en los países que reciben la mencionada migración: Colombia en primer lugar por su contingencia territorial, donde para finales de 2019, se encontraban 1.7 millones de migrantes venezolanos. En esta situación quien sufren más la emergencia y el desamparo legal son las mujeres, quienes se encuentran victimas de una sistemática violencia de género, que aumenta por su particular condición de migrantes. En este documento se propone un análisis descriptivo que toma como referencia el estudio de caso colombiano en el trienio 2017-2019, utilizando un enfoque de Derechos Humanos con perspectiva de género.