El ser humano como miembro partícipe de una sistemática social, desde que nace se ve afectado a eventos públicos que celebran su paso a través de sus distintas etapas evolutivas, como nacimiento, bautismo, cumpleaños, casamiento, hasta llegar a su último evento social que prosigue a su muerte, el funeral. El Sepulcro, es la manifestación material de conmemoración fúnebre y un fiel reflejo arquitectónico que deja indicios de períodos y tendencias que lo influenciaron; su fisonomía es un indicador directo de costumbres, religiones, clases sociales, períodos temporales y posiciones económicas. El objetivo de este trabajo es establecer una primera diferenciación económica y social de las tumbas que se encuentran en el Cementerio del Oeste de la ciudad de San Miguel de Tucumán.