La obra comienza en el año 1860, cuando continúa la campaña africana iniciada en la anterior novela, narrada y protagonizada esta vez por el «profeta» de la paz, el enamoradizo e incorregible don Juan Santiuste. Con la ayuda de El Nasiry, otro miembro de la familia Ansúrez, abandonará Tetuán para llegar a Tánger, desde donde retornará a la península.