Catástrofe poética (eBook, ePUB) - Maffrand, Lara
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Me pregunto, mientras empiezo a leer los primeros poemas de Catástrofe poética, qué puede tener de catastrófico lo poético. ¿Qué efectos tiene una catástrofe? Destrucción irremediable, daño consumado, caos, desquicio, ruptura, traición… Pero, en este caso, no se trata de la "catástrofe" a secas. La adjetivación que la define ("poética") la (nos) rescata del abismo. Lo poético se abre como un camino que salva de la caída o de la pérdida: todo promete, desde el principio, algún sentido. Y es entonces que la catástrofe así nombrada se resignifica y pasa de ser devastación a ser búsqueda,…mehr

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Produktbeschreibung
Me pregunto, mientras empiezo a leer los primeros poemas de Catástrofe poética, qué puede tener de catastrófico lo poético. ¿Qué efectos tiene una catástrofe? Destrucción irremediable, daño consumado, caos, desquicio, ruptura, traición… Pero, en este caso, no se trata de la "catástrofe" a secas. La adjetivación que la define ("poética") la (nos) rescata del abismo. Lo poético se abre como un camino que salva de la caída o de la pérdida: todo promete, desde el principio, algún sentido. Y es entonces que la catástrofe así nombrada se resignifica y pasa de ser devastación a ser búsqueda, interpelación, descubrimiento… conjura de lo que se intuye, de lo que arde adentro. "Escribo para no morir en el intento", escribe quien escribe, y parece ser así porque mientras escribe le es posible aferrarse con las palabras a todo lo que importa, lo que llena, lo que desea y hace propio al nombrarlo… Escribir es sostenerse en esa búsqueda de lo que se sabe verdadero o necesario, de lo que no se negocia porque es vital. La palabra poética se hace así puente: quien lee se encuentra, inevitablemente, en ese mismo revés de lo que quien escribe implora como un grito que se oye a sí mismo en la soledad en la que se alza. Somos, quien escribe y quien lee, el mismo grito, la misma soledad, los mismos brazos implorantes… Del otro lado está la caricia de quien nos quiere bien, el recuerdo de la niñez, el amor de mamá, la presencia de alguien que nos escucha y nos entiende, nuestras propias verdades. La palabra se hace una tendida hacia todo eso que importa y que necesitamos cerca para confirmar que existimos. Si callar a veces es defenderse, como dice ella, hoy escribir es rebelarse... como feroz y preciosa estrategia para resistir.
Autorenporträt
Lara Maffrand nació un 21 de agosto de 2006, con el sol latiendo en sus últimos minutos leoninos. Desde muy pequeña pareció mostrar interés por el arte, influenciada por su madre y su abuela, quienes la criaron entre canciones y cuentos. Así es que, con tan solo unos 9 años, escribió su primer poema. Lara leía mucho, todo el tiempo, y eso la llevaba a crear mundos en su cabeza que luego ponía en papel. De sus sueños, de sus miedos, de lo que le pasaba, escribía poesía. Su estilo estaba muy influenciado por sus lecturas del momento: Bodoc, Pizarnik, Villariño, entre otros, fueron siempre sus preferidos. A Lara le gustaba mucho leer autorxs independientes, lo que le dio otra perspectiva de lo que podía ser la poesía. De más grande, empezó a gustarle la poesía recitada. Así, participó en diversos slams que la insertaron en una comunidad de escritorxs jóvenes e independientes, y comenzó a soñar con llevar esa voz a un público más grande. Acá vibraba mucho su espíritu activista: escribió sobre el feminismo, sobre la homosexualidad, sobre su presente, sobre diversos trastornos y salud mental, y demás temas por los cuales milita. Su corazón intenso también la llevó a escribir muchos poemas de amor, de sueños y futuros con alguien. Lara también escribió canciones, habiendo aprendido piano y guitarra de manera autodidacta. En sus cuadernos no faltan nunca dibujos y collages: a veces las palabras no eran suficientes para explicar todo lo que era y le pasaba… Luego de haber pasado por un episodio depresivo muy fuerte, Lara quiso recuperarse y comenzar a reparar su relación consigo misma. Es así que surge la idea de cumplir ese sueño que siempre tuvo: publicar un libro propio. Mezclando experiencias, sentires y anhelos es que nace Catástrofe poética, poemario que refleja de manera transparente a su autora.