En el acuerdo de París (2015) de la Conferencia de las Partes de Cambio Climático, los países se comprometieron a disminuir sus emisiones de gases de efecto invernadero para que la temperatura del planeta no suba más de los 2 °C, para mediados de este siglo. Dicho compromiso implicará estilos y modos de vida diferentes a los que actualmente conocemos. La escala espacial en la que actúa el cambio climático es planetaria, regional y local. En este escenario, será necesario incluir estrategias de adaptación más acordes con la realidad de las localidades, esto bajo mecanismos que permitan incorporar su conocimiento local en la adaptación. Es precisamente en la esfera regional y local en donde se hace más necesario el conocimiento del entorno geográfico. En este libro se plasman algunos resultados de la investigación en el campo de la climatología aplicada, la adaptación en las áreas naturales protegidas, los cambios estacionales de la vegetación asociados con la variabilidad climática, y el corrimiento altitudinal de la línea arbórea de algunas especies en el volcán Popocatépetl. Se presenta el monitoreo fenológico comunitario y la ciencia ciudadana como una modalidad para crear conciencia del efecto del clima en los bosques y cultivos del país. Del mismo modo, se presenta una revisión de las herramientas de la adaptación, basada en ecosistemas, para la confección de medidas adaptativas en los planes y programas en la escala estatal, local y federal; pasando por la legislación mexicana referente al cambio climático. Con artículos de: José Manuel Espinoza Rodríguez, Lourdes Bello Mendoza, María Guadalupe Leyva Gómez, Violeta Leticia Arriola Villanueva, Luis Manuel Galván Ortiz, María Gabriela Carranza Ortiz, Erika Rocío Reyes González, Carla Torres Beltrán, Lorenzo Vázquez Selem, Osvaldo Franco Ramos, Roberto Lara Deras