Hay lazos que, por mucho que se estiren, no se pueden romper. Rodrigo y Aysel eran amigos desde niños. Inseparables y unidos como nadie, pero todo eso cambia cuando sus familias se enfrentan y pasan a odiarse. Desde entonces los jóvenes han permanecido alejados el uno del otro, y mientras que Aysel lleva una vida tranquila, Rodrigo se ha convertido en un joven inquieto y perseguido por la prensa del corazón a causa de sus conquistas y su tren de vida. Aunque todos piensan que es feliz y lo tiene todo, no es así, le falta lo más importante de su vida, Aysel, que no puede ni acercarse a ella para que la prensa no destruya su vida. Con lo que él no contaba, es que cuando Aysel empieza la universidad, acaba por vivir justo al lado del lugar donde más tiempo él pasa con su fingida vida. Haciendo imposible sus deseos de alejarse de la única mujer que ha querido. ¿Podrá mantenerse firme y estar lejos de ella? Lo ve complicado, porque cada vez que la mira, siente que todo su mundo tiene sentido y la tentación de perderse entre sus brazos y sentirse completo de nuevo, es demasiado grande.