Publicada en 1865, esta obra clave en la bibliografía de Julio Verne, introduce al lector en el mundo de la pasión y la admiración por la ciencia. Es una de sus novelas más conocidas y también es un ejemplo típico del tejido de fantasía y conocimientos que convirtieron a Verne en el fundador de una ciencia-ficción que la realidad se encargó de confirmar en gran parte. Tras el término de la Guerra de Secesión, varios miembros del Gun-Club (dedicado a la confección de armas de guerra) se encuentran sin trabajo y se ponen manos a la obra con la construcción del mayor cañón del mundo jamás creado. Pero también quieren apuntar a la Luna, destruirla, por supuesto, y conseguir así la popularidad y disfrutar de la gloria de ser los padres del ingenio.