Hay un poder oculto en el hombre, mediante cuyo uso puede elevarse a cosas más altas y mejores.
Hay en el hombre un Yo superior, que trasciende el yo finito del hombre-sentido, como la montaña se eleva sobre la llanura.
El objeto de este pequeño libro es ayudar a hombres y mujeres a expresar sus poderes internos de la mente y del espíritu, sabiamente y en armonía con la ley universal; a forjar el carácter y a encontrar dentro de sí mismos ese maravilloso Yo, que es su verdadero ser y que, cuando lo encuentran, les revela que son literal y verdaderamente hijos de Dios e hijas del Altísimo.
No hay manera de evitar la disciplina de la vida. No hay medio por el cual el destino pueda ser "engañado", ni astucia por la cual el gran plan cósmico pueda ser evadido. Cada vida debe encontrar sus propios problemas y dificultades: cada alma debe atravesar sus aguas profundas, cada corazón debe encontrar la pena y el dolor. Pero nadie necesita sentirse abrumado en los grandes conflictos de la vida, porque quien ha aprendido el gran secreto de su identidad con la vida y el Poder Universales, mora en una ciudad inexpugnable, construida sobre y en la Roca de la Verdad, contra la cual las tormentas de la vida golpean en vano.
Aunque esta pequeña obra no ofrece ninguna vana promesa de una vida fácil -pues, si esto fuera posible, sería el mayor de todos los desastres-, sino que más bien se esfuerza por mostrar cómo llegar a ser tan fuerte que la vida parezca casi fácil en comparación (la vida o el destino no cambian ni se hacen más fáciles, sino que el individuo se altera y se hace más fuerte), sin embargo, muestra al lector cómo evitar que su vida sea más difícil de lo necesario. La vida de la mayoría de las personas estaría menos llena de problemas y sufrimientos si tomaran la vida con el espíritu correcto y actuaran en armonía con la Ley Universal.
Se espera que este libro pueda ayudar a muchos a entrar en armonía con la ley y el propósito de la vida y evitar así mucho sufrimiento innecesario: a encontrar el Gran Yo interior, cuyo descubrimiento trae consigo una realización de seguridad absoluta: a poner en expresión y utilizar sabiamente sus fuerzas espirituales y mentales interiores y así entrar en una vida de superación y poder casi ilimitado.
Hay en el hombre un Yo superior, que trasciende el yo finito del hombre-sentido, como la montaña se eleva sobre la llanura.
El objeto de este pequeño libro es ayudar a hombres y mujeres a expresar sus poderes internos de la mente y del espíritu, sabiamente y en armonía con la ley universal; a forjar el carácter y a encontrar dentro de sí mismos ese maravilloso Yo, que es su verdadero ser y que, cuando lo encuentran, les revela que son literal y verdaderamente hijos de Dios e hijas del Altísimo.
No hay manera de evitar la disciplina de la vida. No hay medio por el cual el destino pueda ser "engañado", ni astucia por la cual el gran plan cósmico pueda ser evadido. Cada vida debe encontrar sus propios problemas y dificultades: cada alma debe atravesar sus aguas profundas, cada corazón debe encontrar la pena y el dolor. Pero nadie necesita sentirse abrumado en los grandes conflictos de la vida, porque quien ha aprendido el gran secreto de su identidad con la vida y el Poder Universales, mora en una ciudad inexpugnable, construida sobre y en la Roca de la Verdad, contra la cual las tormentas de la vida golpean en vano.
Aunque esta pequeña obra no ofrece ninguna vana promesa de una vida fácil -pues, si esto fuera posible, sería el mayor de todos los desastres-, sino que más bien se esfuerza por mostrar cómo llegar a ser tan fuerte que la vida parezca casi fácil en comparación (la vida o el destino no cambian ni se hacen más fáciles, sino que el individuo se altera y se hace más fuerte), sin embargo, muestra al lector cómo evitar que su vida sea más difícil de lo necesario. La vida de la mayoría de las personas estaría menos llena de problemas y sufrimientos si tomaran la vida con el espíritu correcto y actuaran en armonía con la Ley Universal.
Se espera que este libro pueda ayudar a muchos a entrar en armonía con la ley y el propósito de la vida y evitar así mucho sufrimiento innecesario: a encontrar el Gran Yo interior, cuyo descubrimiento trae consigo una realización de seguridad absoluta: a poner en expresión y utilizar sabiamente sus fuerzas espirituales y mentales interiores y así entrar en una vida de superación y poder casi ilimitado.