El continuo ser y no ser ese cuerpo, ver cómo se convierte poco a poco en otra persona, la alegría, la sorpresa y también la sensación de vacío de ese nuevo nacimiento, Giovanna Cristina Vivinetto nos las cuenta con el ritmo vertiginoso y encantador de su doliente lengua poética. La madre hija que nace de un padre sublimado y borrado, que recorre las etapas de esta transformación dolorosa y heroica, no tiene arrepentimientos ni miedos, pero tiene la urgencia de contar lo que ha ocurrido. No para encontrar justificaciones, sino para entregarnos a esta hija inesperada en toda su legitimidad. Del prólogo de Dacia Maraini