El domador de palabras: El padre de Marcelo era un artista: guionista de cine siempre quiso dedicarse a escribir. Para Marcelo, su padre no fue un padre ejemplar, y el mismos Marcelo piensa que él mismo nunca fue un hijo ejemplar. Pero ahora que su padre no está, Marcelo descubre quién era su padre, lo que le quería y todo lo que le enseñó sin que él se diera cuenta. Y todo eso lo descubre en las cartas que le escribió durante el rodaje de su última película.