Una tarde de comienzos de verano, junto a un cruce de caminos en el corazón de los montes ólcades, un joven celtíbero es testigo de un combate entre soldados cartagineses y guerreros oretanos. El celtíbero se ve impulsado a tomar partido, y esa decisión lo conducirá a conocer aspectos insospechados de su propio pasado y a jugar un papel protagonista en los trascendentales acontecimientos que están a punto de cambiar el destino de Ispania. La huella del legendario reino de Tartessos, el avance irresistible de Amílcar Barca por el valle del Betis y la resistencia desesperada de la ciudad íbera de Hélike, se entrelazan en un fascinante fresco histórico, que recrea aquel tiempo en que las serranías del interior de la península ibérica se convirtieron de pronto en el escenario decisivo de la lucha por el poder en el mundo antiguo.