Con sus ojos azules y su intenso pelo negro, Lewis Romayne es uno de los hombres más atractivos de Inglaterra, además de uno de los más ricos. Pero a la vez, es también un recluso entregado a la investigación académica en su propia casa, una inmensa finca situada en el corazón de la campiña inglesa.A causa de unas tristes circunstancias, Romayne se ve acogido en casa de unos amigos donde conoce a la inteligente y bella Stella Eyrecourt. Entre ellos crece un afecto que parece ha de acabar en matrimonio, pero el padre Benvell se interpone en esta historia de amor conspirando por los intereses económicos de la Iglesia. Todo en esta obra rebosa oficio y el lector queda atrapado por una inquietante intriga desde la primera línea hasta la última página.