Este nuevo relato de la prolífica serie comienza con la descripción que hace el doctor Watson de su amigo Isa Whitney, adicto al opio. Una noche de junio de 1889, Watson tiene que ir a buscar a Whitney a un sórdido fumadero de los barrios bajos londinenses, a instancias de su desgraciada esposa. Para su sorpresa, allí se encuentra a Holmes, y lo que parecía que iba a ser una historia sobre el mundo del opio y sus lacras da un giro total. Watson se une de buen grado a la investigación que está realizando Holmes, limitándose a enviar una nota a su esposa.Curiosamente, al principio del relato la señora Watson se equivoca y se refiere a su marido como James en lugar de John.Tras su encuentro, Holmes conduce a Watson a las cercanías de Lee, en el condado de Kent. En el trayecto le explica que el matrimonio Saint Clair vivía felizmente en The Cedars, una lujosa mansión. La desaparición del marido, Neville Saint Clair, en misteriosas circunstancias, ha conducido a Holmes al sórdido antro donde le ha encontrado Watson. Según parece, Saint Clair ha sido asesinado por Hugh Boone, un mendigo cuyo labio retorcido le da un siniestro aspecto. Todas las pruebas acusan al mendigo, que ya ha sido encarcelado. Pero la llegada de un mensaje junto con el anillo de Saint Clair hace cambiar totalmente las expectativas. Dr Watson is called upon late at night by a female friend of his wife. Her husband has been absent for several days and, as he is an opium addict, she is sure he has been indulging in a lengthy drug binge in a dangerous East End opium den. Frantic with worry, she seeks Dr. Watson's help in fetching him home. Watson does this, but he also finds his friend Sherlock Holmes in the den, disguised as an old man, trying to extract information about a new case from the addicts in the den.Mr. Neville St. Clair, a respectable and punctual country businessman, disappears. Making the matter more mysterious is that Mrs. St. Clair is sure that she saw her husband at a second-floor window of the opium den, in Upper Swandam Lane, a rough part of town near the docks. He withdrew into the window immediately, and Mrs. St. Clair is sure that there is something wrong.