Es la segunda narración en la que aparece el detective Auguste Dupin. Está basado en la tragedia real de Mary Cecilia Rogers sucedida en Nueva York. En el relato, la asesinada cambia su nombre al de Marie Rogêt y Poe convierte Nueva York en París. Mary Rogers era una atractiva vendedora de cigarrillos y su crimen nunca fue resuelto del todo; en el caso de Marie Rogêt, el personaje "ficticio", se sugiere que el asesino era un marinero desechándose asimismo la especulación de la policía respecto de que Marie fuera víctima de una pandilla; sin embargo, el mismo Poe evita anunciar que acaso haya resuelto el caso de la vida real aunque algunos contemporáneos suyos vieron en el relato precisamente ello, un intento de mayor notoriedad por parte del escritor norteamericano al buscar dar solución al crímen de Mary Rogers.