En 1888 se publicó la primera edición de «El príncipe feliz y otros cuentos», del escritor irlandés Oscar Wilde. Además del cuento que da título a la colección, la obra contiene otras historias que fueron dedicadas a los dos hijos del escritor, pero más que cuentos infantiles, son relatos aptos para adultos que quieran reflexionar sobre la vida y sus contradicciones. Cada uno de los cinco cuentos contiene una lección moral o, al menos, una reflexión sobre las injusticias de la vida, sobre el formalismo propio de la sociedad burguesa de la época, sobre la falta de sensibilidad y el cinismo de algunos, y sobre la presunción y la falta de objetividad de otros.