Todos vamos siendo sorprendidos por descubrimientos que nos iluminan la vida, por acontecimientos que nos cambian oportunamente el rumbo, por cuestionamientos que nos llevan a indagar sobre nuestro propio sentido y por experiencias que nos hacen sentir, felizmente, que estamos vivos. Y con ganas de vivir. Todo eso es este libro. El autor, a quien conocemos pero siempre nos sorprende, nos pone en contacto con esos encuentros que son parte necesaria de nuestra existencia. Porque si hay algo que caracteriza al ser humano es la palabra y la pregunta. ¡Qué pobre, monótona y triste sería nuestra vida si nada nos despertara de un letargo sin medida! Cuando uno termina de leer Encuentros con la vida, tiene la extraña sensación de no saber si el libro encontró el título o el título encontró el libro.