Considerada como una de las grandes obras de la literatura universal, narra cómo Fausto -frustrado por no alcanzar la totalidad de sus conocimientos-, pacta con Mefistófeles, quien le ofrece todo mientras esté en la tierra. Así conoce a Margarita quien queda seducida y embarazada de Fausto. Margarita ahoga a su propio hijo y muere también en los brazos de Fausto. A partir de ahí comienza un sin fin de aventuras, viaja en el tiempo y el espacio: soluciona los problemas económicos del emperador de Alemania, acude a una fiesta de sirenas, ninfas y otro tipo de seres, conoce a Elena (de Troya) con quien tiene un hijo que fallece al intentar volar,...hasta que encuentra un lugar (regalo del emperador) en el que decide vivir en paz hasta su muerte y dirigirse al cielo redimido por su esfuerzo. La obra es una parábola sobre el conocimiento científico, la religión, la pasión y la seducción, la independencia y el amor, entre otros temas. En términos poéticos, Goethe sitúa la ciencia y el poder en el contexto de una metafísica moralmente interesada. Fausto es un científico empírico que se ve forzado a enfrentarse a cuestiones como el bien y el mal, Dios y el diablo, la sexualidad y la mortalidad.