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Hay quienes aseguran que el pasado es irreparable, pero en este libro pretende ser un viraje critico, no para enmendar juicios erróneos, sino para sentar lo que siempre fue una verdad científica indiscutible que solo a Finlay le corresponde, el mérito inmenso de sus descubrimientos, exentos de precedencias y precursores, alejado de toda influencia que no fueran los progresos de la medicina en su tiempo. Este libro es un producto de esta época de profundos cambios económicos y sociales, determinados por la revolución socialista cubana que genera una cultura distinta, más profunda y penetrante,…mehr

Produktbeschreibung
Hay quienes aseguran que el pasado es irreparable, pero en este libro pretende ser un viraje critico, no para enmendar juicios erróneos, sino para sentar lo que siempre fue una verdad científica indiscutible que solo a Finlay le corresponde, el mérito inmenso de sus descubrimientos, exentos de precedencias y precursores, alejado de toda influencia que no fueran los progresos de la medicina en su tiempo. Este libro es un producto de esta época de profundos cambios económicos y sociales, determinados por la revolución socialista cubana que genera una cultura distinta, más profunda y penetrante, que permite examinar las cosas en su real dimensión histórica, sin concesiones al empirismo convencional, ni al subjetivismo tolerante.
Autorenporträt
José López Sánchez (1911-2004). Graduado de Doctor en Medicina en 1938, se dedicó también al estudio e investigación de la historia de las ciencias en general y de la Medicina en particular, campo en el cual se destacó por sus aportaciones originales. Fue autor de numerosos artículos y libros, muchos de estos premiados y traducidos a otros idiomas. Ocupó, entre otros, los cargos de viceministro de Salud Pública y vicepresidente del Consejo Científico, vicepresidente primero y secretario científico de la Academia de Ciencias, fundador y director del Museo Histórico de las Ciencias Médicas Carlos J. Finlay y presidente de la Sociedad Cubana de Historia de la Medicina. Se desempeñó, además, como embajador de Cuba en varios países. Recibió importantes distinciones tales como la Orden de Mérito Científico Carlos J. Finlay y la Orden Ernesto Che Guevara, la categoría de Investigador de Mérito de la Academia de Ciencias de Cuba y la de Profesor de Mérito del Instituto Superior de Ciencias Médicas de La Habana. En 1999 se le otorgó el Premio Nacional de Ciencias Sociales por el Instituto Cubano del Libro y la Academia de Ciencias de Cuba, como reconocimiento a su destacada contribución al desarrollo de las diferentes disciplinas de las ciencias sociales.