En esta obra el Padre Isla nos presenta a fray Gerundio, una suerte de don Quijote eclesiástico a través del cual Isla pone de manifiesto los aspectos más ridículos de la predicación culterana de la época.En este cuarto tomo conocemos las consecuencias de lo acontecido en la mesa de Antón Zotes, los avances de Fray Gerundio en cuanto al estilo y la cólera del magistral. -