Tras su boda con el barón Klaus von Meninher, Luise Shorensen entra en los círculos sociales y aristocráticos. A partir de aquí, la ambición de la bellísima baronesa no tiene límites. Su máximo objetivo es la inmortalidad. Para conseguirla no dudará en urdir un plan atroz: concebir un hijo de un marido que se encuentra en coma y de Drakul, el soberano de las tinieblas.Rafael Barberán considera que «La baronesa» es su mejor y más importante obra, a la que le ha seguido «Trono para una monja».-