7,99 €
inkl. MwSt.
Sofort per Download lieferbar
  • Format: ePub

El pecado de gula, como es sabido desde la Edad Media, es un pecado "carnal", en contraposición a los pecados "espirituales", como la envidia y la soberbia. Es carnal porque hunde sus raíces en la corporeidad del hombre y en el placer que siente comiendo y bebiendo y en las sensaciones que acompañan a estas acciones; es carnal porque requiere del necesario soporte de uno o más órganos del cuerpo humano (el vientre, el estómago, la garganta); es carnal, en fin, porque se transfiere directa y visiblemente a la carne, a la grasa de la persona… El carácter de la gula, como por lo demás el de otros…mehr

Produktbeschreibung
El pecado de gula, como es sabido desde la Edad Media, es un pecado "carnal", en contraposición a los pecados "espirituales", como la envidia y la soberbia. Es carnal porque hunde sus raíces en la corporeidad del hombre y en el placer que siente comiendo y bebiendo y en las sensaciones que acompañan a estas acciones; es carnal porque requiere del necesario soporte de uno o más órganos del cuerpo humano (el vientre, el estómago, la garganta); es carnal, en fin, porque se transfiere directa y visiblemente a la carne, a la grasa de la persona… El carácter de la gula, como por lo demás el de otros pecados, ha sufrido a lo largo del tiempo sensibles metamorfosis, de pecado a enfermedad, de vicio voluntario a disposición hereditaria, de pecado de los ricos a pecado de los pobres, de depravación individual a tendencia social, tantas y tales son las transformaciones sufridas por la gula desde la invención del pecado hasta nuestros días.
Autorenporträt
FRANCESCA RIGOTTI, Milán, 1951, es profesora de Doctrinas e Instituciones Políticas de la Facultad de Ciencias de la Comunicación de la Universidad de Lugano.