El profesor Pounce llega a la idílica aldea de Gillenham junto a su cuñada, su sobrino Nicholas y Carmen, su voluptuosa asistente, en busca nada más y nada menos que de la auténtica Piedra de la Castidad. Se trata de una piedra del río del pueblo que, según cuenta una leyenda olvidada, lleva siglos haciendo tropezar a las mujeres impuras. Las pesquisas científicas del profesor, que incluyen hacer desfilar a las vecinas por el río y pedir referencias de castidad de sus abuelas y tatarabuelas, pondrán patas arriba a toda la comunidad. La esposa del vicario, los Boy Scouts locales o la severa señora Pye, poseída por el alma de un inquisidor, serán la principal guerrilla represora de los impúdicos asaltos científicos del molesto profesor y su cuadrilla. Publicada por primera vez en 1940, La Piedra de la Castidad es probablemente la comedia más desternillante de Margery Sharp.