En este ensayo se estudia la política argentina entre 1862- 1880, haciendo hincapié especialmente en el análisis de la dinámica política durante la década de 1870, especificamente entre el tramo final de la presidencia de Domingo F. Sarmiento (1868-1874), y la guerra civil que enfrentó alEstado Nacional con el Estado de la Provincia de Buenos Aires. De este modo, se ha tratado de interpretar la lógica política del período a través de la reconstrucción de los diversos ámbitos en que se desarrolló la acción política. A lo largo de esta etapa, y como producto de las particulares condiciones históricas que le tocó en suerte atravesar, el régimen político argentino adoptó una dinámica turbulenta, sucediéndose los momentos de exclusión e inclusión ampliada de la opinión pública. En tal sentido, si bien, por una parte, el universo político parece haber estado caracterizado por una tendencia a la concentración del poder en el plano de las dirigencias, favorecida tanto por la decisión oficial de recurrir generosamente a la imposición del estado de sitio que limitaba la vigencia de los derechos y garantías civiles, como por la insistencia de la oposición porteña en recurrir a la vía revolucionaria para revertir sus derrotas electorales, también resulta posible identificar el desarrollo de un movimiento inverso, de ampliación del escenario de la política y de resurrección de las prácticas republicanas en el marco del proceso de Conciliación de los Partidos de 1877. En este caso, el presidente Avellaneda y las facciones porteñas (mitrismo y alsinismo), buscaron poner punto final a la inestabilidad generada por la ruptura revolucionaria de 1874 y consolidar definitivamente la paz a escala nacional, dando un impulso definitivo al régimen de la República de las lnstituciones.