Él reclamará su empresa. ¿Pero puede reclamarla a ella también?Everleigh Bradford no cederá fácilmente el control del viñedo familiar que espera heredar. Ya ha perdido demasiado. Si debe enfrentarse al nuevo y rico propietario, Adrián Cabrera, ¡lo hará! aunque tenga que luchar contra su ardiente respuesta al inquietante millonario.Traer a Everleigh a su casa en el sur para demostrar que protegerá su herencia es esencial para su relación laboral, pero es peligroso. La inocencia de Everleigh es embriagadora y ella merece todo lo que el pasado de Adrián y su férreo autocontrol no le permiten darle. Por muy tentadora que sea...